Descripción y usos
El
Ácido Fosfórico es el fertilizante fosfatado más utilizado en fertirrigación y frecuentemente se cubren con él la totalidad de las necesidades de fósforo del cultivo.
El fósforo es imprescindible para realizar la fotosíntesis y para formar compuestos orgánicos. Interviene en la respiración celular y en el transporte y almacenamiento de energía. Interviene también en la formación de flores y adelantamiento de la maduración. A niveles bajos de fósforo, la planta reduce el nivel de producción de flores y, por tanto, de cuajado.
Puede ser usado como un
agente anti-incrustante en suelos, en aplicación directa en pre plantación o suministrado directamente al suelo o en agua de irrigación.
Importancia y beneficios del producto:
- PH óptimo para la disponibilidad de elementos nutritivos.
- Prevención y/o eliminación de obstrucciones en depósitos en redes de riego y emisores.
- Fuente de fosforo indicada para aplicación edáfica, foliar o mediante sistemas de fertirriego.
- Transferencia de energía dentro del tejido celular.
- Composición de cromosomas, DNA, RNA.
- Desarrollo radicular.
- Porcentajes de flúor mínimos en comparación con otros productos del mercado.
Dosificación y control
Omega 1254D es totalmente soluble en agua y puede ser
aplicado en riego por goteo o aspersión. La dosificación recomendada dependerá del cultivo específico.
Uno de nuestros representantes técnicos hará las recomendaciones para cada caso en particular. Para la aplicación y dosificación de este fertilizante se debe tener en cuenta: edad del cultivo, tipo de sustrato, fertilizantes a mezclar y frecuencia de aplicación.
El fósforo es el elemento más difícil de aplicar, pues, además de su baja solubilidad, existe el peligro de precipitación al reaccionar con el calcio que puede contener el agua de riego y que produce el paso del fosfato monocálcico a bicálcico. Similares efectos se producen al mezclar fósforo y magnesio.
Si se aplica ácido, este se debe aplicar antes que los fertilizantes. El ácido se aplica sobre el agua, lentamente (nunca hay que aplicar agua sobre el ácido).
En seguida se aplican los fertilizantes, partiendo de los menos solubles. Se recomienda realizar la mezcla de fertilizantes en la mitad del volumen de agua a utilizar. Agitar vigorosamente y luego agregar agua hasta completar el volumen total de agua.